De vacaciones con incertidumbre

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De vacaciones con incertidumbre

El Elche se va de vacaciones sin saber quién será su entrenador la próxima temporada y con muchas dudas en torno a la confección de la plantilla.

Jorge Llopis,

La plantilla del Elche se despide hasta el próximo verano. Los jugadores de Fran Escribá se marcharon de vacaciones el pasado sábado tras el encuentro ante el Levante con el que cerraron la temporada y se incorporarán al trabajo cuando empiecen a preparar la campaña 2014-2015, un curso que está plagado de incertidumbre para el club franjiverde.

Al apartado institucional, en el que Anguix necesita rubricar sobre el papel el acuerdo que ha alcanzado con Hacienda, se suma el tema deportivo. A día de hoy, el futuro del cuerpo técnico y de un porcentaje importante de los futbolista está en el aire. Fran Escribá tiene contrato con la entidad hasta el 2017, pero su continuidad al frente del equipo no está asegurada. A diferencia de otros años, el entrenador no ha dejado claro públicamente su intención de continuar en el banquillo franjiverde. 

Sí que está claro, en cambio, cuánto vale Fran Escribá. El club que quiera contar con los servicios del entrenador valenciano tendrá que pagar al Elche un millón de euros. Una cantidad asequible para un club de nivel, pero significativa. El equipo que ha sonado con más fuerza es el Sevilla, que está pendiente de la continuidad de Unay Emery, que el miércoles se juega su futuro en la final de la Europa League. Si gana el torneo y por ende entra en la Champions, hay altas posibilidades de que el técnico vasco continúe en Nervión; lo que cerraría las puertas a Escribá. También ha sonado el nombre del preparador franjiverde en Italia, aunque sin concreciones.

El futuro de Víctor Orta también es incierto. Su segundo, Emilio Vega, tiene un acuerdo verbal con el Córdoba y parece que su salida es cuestión de días. No obstante, la marcha de Vega no va ligada a una posible salida de Orta. El director deportivo franjiverde ha ido de la mano de Escribá durante el pasado curso y su futuro podría estar ligadao al del técnico.

Respecto a la plantilla, hay muchas dudas en torno a la próxima temporada. Hay cuatro futbolistas que acaban contrato y que presumiblemente no continuarán. Se trata de Manu Herrera, Damián Suárez, Sergio Pelegrín y Coro. El uruguayo era el único que tenía opciones reales de ser renovado, pero las limitaciones económicas que afrontará el club el próximo curso y el enfado de Escribá por su aumento salarial "a escondidas" del resto de la plantilla hacen que el lateral tenga muchas papeletas para abandonar la entidad. El Betis se ha interesado por él. 

Salvo que el Elche logre solucionar su limitación presupuestaria (será sancionado por la Liga con la obligación de contratar jugadores por el salario mínimo, 130.000 euros anuales), el futuro de Tyton y Pasalic también apunta lejos del Martínez Valero. Ambos futbolistas estaban en la entidad franjiverde en calidad de cesión por el PSV Eindhoven y Chelsea respectivamente. Pero el club no podrá asumir el gasto que supondría contar con sus servicios otro años más pese a que es una opción que ven con buenos ojos tanto los técnicos como los futbolistas.

La otra incógnita es Jonathas de Jesus. Con 14 goles a sus espaldas, ha sido clave en la permanencia del Elche, que busca ahora financiación para pagar los 1,5 millones que le permitirían adquirir el 50% de los derechos del futbolista. El brasileño quiere marcharse y así lo ha dejado claro en reiteradas ocasiones públicamente. En el Martínez Valero asumen su marcha, pero no quieren que salga gratis y desde el consejo de administración trabajan para pagar la cláusula con la idea de una futura venta.

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