Parras: “Mi forma de entender el fútbol es distinta a la de Toril”

“Estamos todos juntos en esto”. Vicente Parras tiene trabajo por delante. El técnico del Elche CF ejerce sobre el césped, como entrenador, y en el vestuario, como psicólogo. El alicantino aterrizaba el lunes en el vestuario del primer equipo con la misión de salvar del descenso al conjunto franjiverde. Su hoja de ruta la explica en COPE Elche (100.8 FM), detectar problemas y poner soluciones, cerrar el grifo de goles en contra y aprovechar el talento en los metros finales, presión, verticalidad, ritmo y ser prácticos sin grandes cambios. Una mezcla de ingredientes en la que los actores principales deben ser unos jugadores que hasta el momento no han demostrado saber jugar con la presión del descenso. Vicente Parras calienta, preparado para saltar al verde y reconoce que no se trata de poder decirle ‘no’ al Elche CF sino de no querer “porque quedarme en casa de brazos cruzados me haría quedarme con el ‘qué hubiera pasado’ si el equipo desciende”. Ha llegado el momento de los hechos, las palabras ya se han escuchado demasiado.

¿Qué percepciones tenía del equipo y cómo lo ha encontrado?

Me interesaba el estado anímico de la plantilla y me la he encontrado fastidiada, algo positivo porque significa que no les da igual la situación. Hemos intentado recuperar sensaciones, entre lunes y martes, y he notado un cambio en la moral.

¿Cuál ha sido su primer mensaje a la plantilla?

Que estamos todos juntos en esto. La situación hay que cambiarla y ellos tienen que trabajar para hacerlo, yo estoy para arrimar el hombro, intentar detectar los problemas y poner mis soluciones, pero entre todos y sobre todo ellos en el terreno de juego son los que tienen que cambiarlo.

¿Es tema de piernas o de cabeza?

Va muy unido todo. El equipo corrió tanto o más que su rival en el último partido pero lo hizo mal. Noté mucha ansiedad ante el UD Almería. Hay piernas pero hay que encontrar la dirección adecuada.

¿Es más cuestión de entrenador o de jugador?

Es difícil determinarlo. El jugador ha estado siempre a muerte con el entrenador pero hacen lo que les dicen.

¿Tiene armas el Elche CF para salvar la categoría?

Firmemente sí. Lo que tenemos que hacer es cerrar el grifo de goles en contra y trabajar en mejorar en las disputas individuales y colectivas en materia defensiva. Tenemos talento arriba, si nos sabemos proteger en defensa y aprovechar la calidad, podemos salvarnos.

¿Por qué ha llegado el Elche CF a esta situación?

Ha habido circunstancias que se han ido agravando. En psicología se conoce como profecía autocumplida y se trata del 'ya verás cómo nos metemos'. Además se juntan las lesiones, sancionados, partidos remontados y al final acaba pasando. Hay que cambiar la mentalidad y pensar en positivo y pasar del 'ya verás cómo nos metemos' al 'ya verás cómo nos salvamos'. Hay que pensar en positivo pero sobre todo actuar en positivo. Si cada vez que te tiran un córner te tiemblan las piernas tienes que corregirlo.

¿Está el equipo preparado para regatear la presión del descenso?

Hasta el momento no lo han demostrado, ahora lo vamos a demostrar. Si el trabajo de los entrenamientos se pasa a los partidos nos vamos a salvar bien. Percibo sensaciones positivas porque la agresividad e intensidad de estos días no la había visto salvo en contadas ocasiones como en Reus o contra el Girona FC en casa.

¿Cómo le ha acogido el vestuario?

Muy bien, no esperaba menos. Es un vestuario muy profesional y me lo han demostrado en cada indicación y corrección que he hecho ejecutándola sin poner nada en duda. El vestuario está comprometido, me he sentado con los jugadores y les he mirado a los ojos y me lo han transmitido también en sus palabras. Todos me han dicho lo mismos como si tuvieran un mismo mensaje. No quieren estar en esta situación y están deseando sacarlo adelante.

A estas oportunidades no se les puede decir no…

No es que no pueda, es que no quiero. Quedarme en casa de brazos cruzados pensando que viene otro entrenador, el equipo baja y yo pude salvar al Elche CF me haría quedarme pensando 'qué hubiera pasado'. Los 'qué hubiera pasado' siempre están rebotándote en la cabeza.

¿Es ‘responsabilidad franjiverde’?

No quiero ponerme al frente del franjiverdismo porque no soy el que más de la ciudad. Hay mucha gente que sufrido en muchas categorías y muchos años. Yo soy el entrenador, y máximo responsable, y espero estar a la altura de las circunstancias.

¿Cuál es el primer pensamiento que se le viene a la cabeza cuando le ofrecen entrenar al Elche CF?

Aceptarlo sin dudas. Si piensan que soy el idóneo voy a trabajar y a dar un paso al frente como siempre.

¿Es un sueño?

Si porque siempre sueñas con lo mejor. Yo pensaba que tendría que salir del Elche CF para volver. El año pasado pude salir a Segunda División B y me quedé porque había un buen proyecto pero nunca he usado el filial para irme a otro sitio, me quedé porque es donde me gusta estar.

¿Quién fue la primera persona a la que le dijo que el Elche CF le había llamado? ¿Qué le dijo?

Mi mujer. Sigue blanca desde entonces, me dice que confía en mí, y los vecinos (risas) pero el primer crítico es mi hijo de diez años que aunque ganemos me dice la verdad. No me ha dicho nada del primer equipo pero yo le he dicho que no se crea nada de lo que oiga, ni bueno ni malo, que voy a seguir siendo el mismo aunque es verdad que en estos días aún no he podido ir a recogerle al colegio. Es muy futbolero y pasional, vamos a llevarlo bien.

¿Entraba en sus planes entrenar a tan alto nivel?

No pensaba una situación así porque siendo entrenador del filial no es bueno subir por una circunstancia así. A todos nos va bien si al Elche CF le va bien. Yo pensaba en hacer un buen trabajo y ganarme un sitio en Tercera, Segunda B o que me llamaran del primer equipo.

¿Qué ha cambiado del Vicente Parras que entrenaba en el Caja de Elche al que va a debutar el sábado en Mallorca con el Elche CF?

Muchas cosas en más de veinte años. Hay una experiencia de vida y una licenciatura cursada en derecho que te hace madurar. En cuanto a fútbol se que no lo voy a inventar. Hay que jugar con rigor táctico, buenos jugadores y echarle lo que hay que echarle.

¿Ha sentido el cariño de la afición por la calle?

He sentido reconocimiento con un 'te lo mereces' y también cierto paternalismo con un 'que te vaya bien'.

¿Qué tres palabras definen su diccionario futbolístico?

Presión, verticalidad y que pasen cosas en el área contraria. Eso dice al jugador a qué queremos jugar. No me planteo quedarme atrás y salir a la contra, otra cosa es que durante un partido haya que adaptarse.

¿Cómo va a jugar su Elche CF?

Intentaremos cerrar líneas sin meternos atrás, si nos meten tendremos que saber defendernos fuerte a nivel individual y grupal. Si podemos correr, correremos y si no habrá que saber parar el balón y tenerlo. Tengo jugadores pero eso el tiempo hará que lo asimilen. Es difícil, de hecho estoy aquí porque se ha buscado un cambio significativo y eso cuesta absorberlo de la noche a la mañana.

¿Su forma de entender el fútbol es distinta a la de Alberto Toril?

Si, cada uno entiende el fútbol a su manera. No quiero cambiar grandes cosas, sólo tener claras tres cosas y que asimilándolas nos dé para mantenernos. Hay muchos matices y diferencias entre su fútbol y el mío.

¿Por ejemplo...?

Me gusta un ritmo de fútbol elevado de 95 minutos de juego al 100% y el que no pueda que no siga. Si puedo salir en quinta velocidad salgo, y si tengo sexta, subo el nivel. Para eso me he traído jugadores al filial que me daban esas cualidades a mi fútbol. Ahora no pienso en eso, sólo en ajustar las tres cosas que calen y consigamos entenderlas.

¿Da tiempo en seis partidos o cree que la oportunidad llega tarde?

Con más tiempo no se concentrarían tanto los trabajos, no puedo hacer todo lo que me gustaría y tengo que tener unas prioridades. En Mallorca han tardado dos semanas en conseguir la primera victoria desde el relevo en el banquillo.

Usted es entrenador, no un mago…

No voy a hacer un gran cambio, voy a ser práctico y respetaré lo que ya se ha  trabajado en parte ofensiva aunque con más velocidad. Lo importante es mejorar la parte de atrás. No vengo aquí a cambiarlo todo en dos días porque no puedo.

¿Usted en además de entrenador buen psicólogo según dicen?

Yo puedo motivar pero lo importante es lo que cada uno lleva dentro, mi motivación es mía, la de los demás puede que no sea como la mía. Trabajo ese aspecto pero no depende de mí. Esto no va de Vicente Parras, agradezco el apoyo y me parece genial que la afición se ilusione, pero yo estoy deseando salir del foco mediático y sean los jugadores con su trabajo los que se pongan al frente y se hable de ellos.

¿Toril le ha dado algún consejo?

Nos despedimos de manera cortés y educada pero poco más. No empiezo de cero porque he hablado con capitanes y jugadores para saber qué se puede mejorar. Deseo que todo lo que se me transmita lo hagan en el campo y el foco mediático pase de mí a ellos. Yo voy a transmitir mi idea pero los que la ejecutan son ellos. Tengo mi parte de responsabilidad.

¿Mallorca es una final?

Una cosa es afrontarlo como una final, en actitud, y otra que no quede más temporada después. Queda mucha Liga no pensemos que ahora vivimos en un pico de ilusión y si el sábado se pierde nos hundimos. Mirando hacia abajo te metes abajo, a mí lo que me ha ido siempre bien es mirar hacia arriba para estar arriba.

¿Tiene alguna cifra de puntos en su libreta para conseguir la permanencia?

Siempre se habla de 50 puntos pero hay cruces de equipos en duelos directos y muchas variables. Prefiero no pensar es eso y centrarme en mi equipo. Aquí todos quieren apretar y vender cara la categoría, conforme la Liga se acaba las oportunidades son menores y los partidos son a vida y muerte.

¿Jugar lejos del Martínez Valero es ahora un punto a favor o en contra?

A favor sin duda. El equipo está muy atenazado por el runrún, el nerviosismo y la ansiedad.

¿El conocimiento de determinados jugadores, por su etapa en el filial, o la veteranía de otros les da preferencia en su pizarra?

Yo tengo en mi cabeza rendimiento. Sé cómo quiero jugar en Mallorca y he probado cosas. Los que mejor se adapten a mis ideas serán los que jugarán. No pienso en si han estado en el filial, están o son veteranos.

¿Qué es lo que más le preocupa?

Ser capaces de mostrar en el partido lo que mostramos en los entrenamientos. Hablar está muy bien pero hay que plasmarlo en el campo, si no serán palabras vacías. Hay que dar el paso definitivo en el campo y superar esa barrera.