Julián Gil: "Estoy convencido de que habríamos logrado la salvación jugando"

El CBM Elche Paquito rent a Car seguirá la próxima temporada militando en Primera Nacional masculina. El equipo senior de balonmano ha recibido con buen agrado la decisión propuesta por la RFEBM a su Junta Directiva (que deberá aprobar) de dar por finalizadas la temporada en las categorías nacionales, permitiendo los ascensos pero cancelando los descensos. La medida beneficia de pleno a un equipo que estaba en posición roja de la clasificación, pero que en los últimos partidos estaba mostrando su mejor versión con el refuerzo de Manu Vázquez. Julián Gil, entrenador de los ilicitanos, ha repasado en COPE Elche (100.8 FM) las claves de la decisión y qué significa para un grupo de jugadores que tendrán la oportunidad de ganarse una vida extra en los despachos, pero siempre tendrán la duda de qué podría haber pasado en los últimos siete partidos de competición liguera.

¿Cómo ha sentado la medida adoptada por la RFEBM en la plantilla, y la consiguiente salvación?

Estamos contentos porque el objetivo marcado a principio de temporada era que el equipo pudiese jugar el próximo curso en Primera Nacional y se ha conseguido. Se ha logrado por esta situación excepcional, nos habría gustado conseguirlo deportivamente pero ha sido una medida sensata y, a la vez, la más justa.

¿Le habría gustado conseguirlo en la pista?

Sin duda. Yo siempre he abogado porque termináramos la temporada en la pista. Si no hubiésemos sacado el año habría sido por nuestra culpa, y nadie podría haber dicho que no habría sido así, pero estoy convencido de que habríamos logrado la salvación jugando en el 40x20.

Contentar a todos los equipos es imposible pero el premio gordo se lo llevan los que iban a descender y se han salvado.

Satisfacer a todos es imposible. Lo mires por donde lo mires, por arriba o por abajo, no hay una solución absoluta. Seguro que Salesianos Alicante, que es tercero, pensará que podía haberse metido arriba en puesto de sector para ascender y nosotros nunca sabremos si podríamos habernos salvado jugando. Estábamos en claro ascenso y en una línea que invitaba al optimismo. Son hipótesis que no podremos resolver y sólo queda prepararnos para el año que viene hacerlo mejor.

No hay que olvidar que el equipo dio un golpe encima de la mesa ganando en su último partido a un rival directo como BM Mislata y con el refuerzo de Manu Vázquez.

El equipo estaba creciendo. Tener jugadores tan jóvenes en el primer año tenía un peaje. Hemos tenido que medir los tiempos y ver qué te quitan una cuarta parte de la temporada, que es cuando debes llegar en el mejor momento, contra equipos cercanos en la clasificación te hace pensar. Tampoco hay que darle más vueltas, hay que dar continuidad el año que viene al trabajo.

Es una oportunidad que el equipo debe aprovechar, es una vida extra para volver a empezar, pero con esa experiencia que faltaba.

Salvar el año no era por estar en Primera Nacional o Segunda Nacional el próximo curso, era para dar continuidad a un proyecto y a un nivel que debe subir en un futuro a corto plazo. Esta decisión nos da la oportunidad de seguir en una categoría que por calidad, jugadores y estructura nos corresponde.

Superan un año de transición, ganan en moral y refuerzan el objetivo de formar jugadores para el futuro.

El CBM Elche es un club formador. Sólo nosotros sabemos lo que hemos pasado este año con jugadores muy jóvenes de primer año, excepto dos. Ha sido un año de realidad y transición que, si cerramos así, será una oportunidad maravillosa. Hemos crecido durante muchos partidos que hemos tenido que superarnos con muchos altibajos, más bajos que altos, pero este peaje que hemos pagado los va a dar mucho. Les hace ver cómo es el balonmano.

¿Ha podido repasar la decisión con sus jugadores?

Nos hemos enviado whatsapp en el grupo. Están todos en casa. Algunos hacen más deporte que otros y espero que esto no haga que bajen la guardia y se confíen. Siempre les hemos dicho que estén preparados por si había que volver y jugar los siete partidos que quedaban. Es un premio y una posibilidad que deben aprovechar cuando volvamos a la normalidad.

¿Qué es lo que más le ha sorprendido para bien y para mal esta temporada?

Pensaba que íbamos a tomar la senda de la victoria antes de lo que lo hicimos. Empezamos bien la temporada y eso quizás hizo que nos despistasemos. Luego pasamos momentos muy duros. Lo que más me ha costado asimilar es que los tiempos que tenía programados no llegaron cuando creíamos que deberían llegar. Igual nos faltaba esa experiencia que sabíamos que necesitamos pero, yo creía que podían superar antes. Es necesario que un equipo invierta en esa faceta. Y en el otro lado de la moneda, hay muchos jugadores que han mejorado muchísimo, especialmente en defensa y portería. Se ha dado un gran salto de calidad y confianza a nivel inidividual y grupal.

El equipo nunca ha bajado los brazos, a pesar de las derrotas.

Siempre lo hablábamos los lunes cuando volvíamos a entrenar. Las derrotas no han debilitado un grupo que siempre ha estado unido y nunca ha rebajado sus ganas de trabajar. Éramos quince jugadores en el primer entrenamiento semanal. Yo siempre le he dicho que me jugaba lo que quisieran a que no había un sólo equipo de la categoría que tuviera a quince jugadores entrenando un lunes, y más siendo penúltimos. Eso no es culpa de un entrenador, es culpa de la educación que se le ha dado en el club y de las ganas e ilusión que tenían los chavales cada día. 

¿Cómo cree que estructurará la RFEBM la Primera Nacional la próxima temporada con ascensos y no descensos?

Va a ser la parte más complicada. Si hay seis grupos de Primera Nacional, estamos hablando de doce equipos para División de Honor Plata la próxima temporada, así que supongo que se tendrá que jugar un playoff o tomar alguna medida porque no es asumible. En el otro lado tengo también la duda de qué pasará con los equipos de Segunda Nacional porque hay muchos sectores y equipos que tendrán que pelear por un ascenso, y no cabemos todos. La decisión que ha tomado la RFEBM es valiente pero tienen mucho trabajo por delante. Decidir en abril evita especulaciones y tener que pensar en el futuro, pero ahora les toca evitar que haya las mayores injusticias posibles. No será fácil.