Manu Vázquez: "¿Presión y salvador? Nada de nada"

Dicen que segundas partes nunca fueron buenas pero Manu Vázquez son palabras mayores. El balonmanista ilicitano sabe qué es volver y triunfar con la camiseta de su CBM Elche. Ya lo ha hecho y, aunque haya sido en circunstancias diferentes, ha dejado su sello. El central salió de Carrús hace cuatro temporadas para, con 21 años, enrolarse en las filas de BM Alarcos en División de Honor Plata. La experiencia en Ciudad Real no fue como apuntaba su gran proyección y, un año más tarde, volvería a Elche para formar parte del ambicioso proyecto comandado por José Luis Navarro, que se quedó a las puertas del ascenso en el sector de Arrecife. La mala experiencia, unida a la fuerte pujanza de CBM Elda CE Eldense haría que el jugador volviera a hacer las maletas para seguir creciendo lejos de Carrús. Dos años después, Manu Vázquez regresa para ponerse a las órdenes de Julián Gil y pelear por el reto de sacar al equipo de su vida deportiva del descenso. El balonmanista ha destacado en COPE Elche (100.8 FM) que “yo no soy héroe ni de mi casa” ante la expectación que ha despertado su regreso a las pistas en el grupo E de la Primera Nacional masculina. Humildad aparte, su regreso da un argumento más al equipo para creer que el milagro de la permanencia es posible. A pesar de que no será hasta el próximo 7 de marzo, dentro de dos jornadas, cuando vuelva a enfundarse la camiseta ante CBM Mislata (el equipo jugará antes en tierras valencianas de manera consecutiva contra Levante UD BM Marni y Viscoconfort Maristas Algemesí) en Carrús; el CBM Elche Paquito rent a Car tendrá ocho finales por delante para superarse y cambiar el refrán a terceras partes, siempre son buenas.

¿Qué le ha hecho tomar la decisión de volver?

La insistencia de la directiva del CBM Elche y la situación en la que se encuentra el equipo. He ido un par de veces a verles jugar y tenía la sensación de que podía aportar mi granito de arena y vamos a ver qué tal.

La situación es complicada. ¿Ve mimbres para poder conseguir la permanencia?

La situación es bastante difícil porque hay equipos que son filiales y pueden echar mano de jugadores de los conjuntos profesionales, pero si veo la posibilidad. Si no creyera no estaría dispuesto a intentar pelear para conseguir el objetivo. Si no, no habría vuelto.

¿Qué necesita el equipo?

Son chavales jóvenes a los que, con 18 o 20 años, no se les puede pedir que controlen un partido y sepan cómo gestionar los últimos minutos igual que lo hace un equipo con una media de edad más elevada. Eso es algo que te lo da la experiencia y el haber jugado muchos finales de partidos. Lo bonito que viven, es el ir creciendo este año. Es un aprendizaje exprés que les demuestre que pueden jugar en Primera Nacional partidos muy complicados que les hará aprender. Si yo puedo ayudar a que esos finales de partidos, o momentos más críticos, se puedan gestionar un poco mejor debo hacerlo.

Entenderá que la gente le tiene como el jugador que puede marcar la diferencia, ese salvador...

Ni mucho menos. Yo no soy héroe ni de mi casa. Voy a disfrutar y a pasármelo bien. Es algo que he hablado con Julián Gil y es mi intención. Si además conseguimos que los chavales aprendan un poco más y se consigue el objetivo mucho mejor. ¿Presión y salvador? Nada de nada.