El 1X1 del Alcorcón - Elche

EDGAR BADÍA: Salvador. El portero catalán mantiene vivo al disipó con sus paradas y permite sumar una victoria desde la seguridad bajo palos. 

ÓSCAR GIL: Afianzado. El canterano se sobrepone a un inicio de dudas consolidándose en la faceta defensiva en el lateral derecho. 

GONZALO VERDÚ: Imperial. El cartagenero le da los tres puntos al Elche gracias a su acierto en el balón parado, pero también por su seguridad defensiva. 

DANI CALVO: Recuperado. El oscense se recupera tras marcar el gol en propia puerta del rival y se convierte en un seguro en los balones aéreos .

JUAN CRUZ: Activo. El lateral madrileño despeja las dudas de la primera parte subiendo el nivel tras la reanudación. 

GONZALO VILLAR: Desapercibido. El murciano sigue sin encontrar su sitio en las funciones que Pacheta quiere plasmar sobre el césped y pasa de puntillas en Santo Domingo. 

RAMÓN FOLCH: Impreciso. El centrocampista falla pases en la salida de balón, generando muchas dudas y cometiendo errores no forzados. Tuvo que ser sustituido. 

IVÁN SÁNCHEZ: Intermitente. El extremo fue de menos a más, pero demuestra en cada acción individual la calidad que atesora. No fue constante como en otras citas por su banda. 

PERE MILLA: Ausente. El mediapunta catalán no aportó nada al juego ofensivo del equipo y no está cumpliendo las expectativas generadas en torno a un futbolista que viene de Primera. 

FIDEL: Voluntarioso. Le pone más ganas que acierto en sus acciones con falta de precisión, aunque volvió a demostrar el guante de su pierna izquierda en el coronel del segundo gol.

YACINE: Constante. Lo poco que hizo, lo hizo bien. Aunque sigue sin ver portería fue clave en los dos goles, provocando la falta y el saque de esquina que dieron lugar a los tantos. 

MANU SÁNCHEZ: Seguro. El cordobés dio equilibrio y orden al equipo con su salida en la segunda parte. Una lesión en la rodilla le puede tener apartado de los terrenos de juego un tiempo importante. 

NINO: Aislado. El almeriense salió al campo con mucha voluntad, pero la falta de conexión con la parte delantera del equipo le relegó a un segundo plano. 

NUKE: Práctico. El congoleño no se complicó la vida, jugó fácil y supo sostener al equipo en los momentos clave con el marcador a favor. 

PACHETA: Motivador. El burgalés enderezó el rumbo del partido ordenando ideas y con una charla en el descanso que activó las pilas a los jugadores. Como el equipo, supo leer el partido a base de esfuerzo e intensidad en la segunda parte para conseguir la primera victoria.