Inicio decepcionante

Pacheta apostó por Gonzalo Villar como acompañante de Ramón Folch en la medular ante la ausencia por sanción de Nuke. También fueron titulares Josan en el extremo izquierdo y Nino como referencia ofensiva. Fidel y Yacine, al banquillo.

La primera parte fue de lo peor del Elche de Pacheta. Un equipo plano que vio como un recién ascendido, que debutaba en la categoría de plata, le desharbolaba con orden táctico y pragmatismo arriba. El técnico burgalés tiene un problema a nivel defensivo, al menos eso se desprende de su estreno liguero. Tekio y Juan Cruz se vieron superados en más de una ocasión y ni Dani Calvo ni Gonzalo Verdú supieron apagar los fuegos que les llegaban desde los laterales. A la media hora, los dos centrales llevaban tarjeta amarilla. 

En ataque, el equipo franjiverde no encontraba el camino. Gonzalo Villar no estaba acertado en la distribución del juego y ni Iván Sánchez ni Josan eran capaces de sorprender por sus bandas. El juego ilicitano acababa abusando del balón aéreo. Y ni Pere Milla ni Nino están hechos para jugar a eso. Solo una ocasión para los locales en la primera mitad. Dani Calvo cabeceó desviado una falta lateral. 

Dos goles en nueve minutos

La mejor disposición de los visitantes empezó a desembocar en peligro sobre la meta de Edgar Badía y cerca de la media hora el Fuenlabrada encontró premio a su atrevimiento. Nteka recibió dentro del área con total comodidad y Dani Calvo tuvo que derribarle para evitar que lanzara. Penalti claro que los árbitros del VAR confirmaron a González Esteban. Un ex franjiverde, Hugo Fraile, engañó a Badía y marcó el primer gol de la historia del Fuenlabrada en Segunda. 

No hubo reacción por parte del Elche, que siguió perdido y viendo como su rival se le subía a las barbas. Nueve minutos después, jugada parecida a la del primer gol. Balón que entró por la banda derecha franjiverde y el central David Prieto remató para aumentar la ventaja en el marcador. 

Resulta difícil entender el porqué Pacheta no hizo cambios al descanso. Reaccionó a los cinco minutos, dando entrada a Fidel y Yacine. Nada cambió. El Elche siguió perdido, sin ideas, como si el partido no fuera con ellos. Solo Iván Sánchez intentó algo diferente, pero el jienense no puede remar solo. Un dato significativo de lo que ofrecieron los franjiverdes: el primer disparo a puerta, a los ochenta minutos.

Sin reacción

El Fuenlabrada siguió a lo suyo, con orden y buena actitud defensiva. Incluso a la contra pudo sentenciar. El Elche fue ahogándose en su propio juego y en ningún momento dio la sensación de tener la mínima opción de levantar el partido. El último en entrar fue Manuel Sánchez, más como un parche para la medular que como una alternativa para cambiar la dinámica. 

No hubo ni siquiera arreón final por orgullo. Ni un centro a la desesperada que encontrara rematador. Inicio decepcionante de un Elche que no ha sabido traslada a la Liga en la primera jornada sus buenas impresiones de pretemporada. Pacheta aún tiene mucho trabajo por delante.