Primer once, primeras pruebas primeras dudas

Sebastián Beccacece sorprendió ante el FC Barcelona. No fue por la elección de los titulares o por el sistema, adelantados ambos conceptos en la previa que ayer ofrecíamos en Elche Directo del Elche CF-FC Barcelona, sino más bien por el papel de determinados jugadores sobre el terreno de juego. Futbolistas que tuvieron que ajustarse a un perfil diferente al que llevan ejecutando durante su carrera deportiva.

La llegada del entrenador argentino al estadio Martínez Valero había levantado expectación en torno al dibujo táctico que podía emplear sobre el césped. Más allá de las características especiales que pueda tener el duelo ante el conjunto azulgrana, el preparador franjiverde confirmó la idea de jugar con defensa de cinco, que hemos apuntado durante la semana desde los análisis que ofrecemos en estas líneas.

Defensa versátil 

Beccacece juega con cinco en fase defensiva y moldea la retaguardia para desplegar a un carrilero en fase ofensiva. El matiz táctico fue el primero que se dejó ver en una alineación en donde el argentino apostó por Palacios, Pedro Bigas, Mascarell, Clerc y Lautaro escoltando a Edgar Badía. El equipo franjiverde soltaba amarras a la hora de atacar proyectando a Lautaro por la banda zurda, y Clerc haciendo de lateral, mientras Fidel pasaba a jugar por dentro abandonando si posición de extremo.

El dibujo táctico defensivo definió a Mascarell como central. No es la primera vez que el canario actúa en esa posición, pero siempre que lo ha hecho ha sido por exigencias del partido o necesidades de la plantilla por las bajas, no por decisión propia. Además, resulta curioso ver al tinerfeño en el perfil izquierdo siendo diestro, mientras Pedro Bigas, que es zurdo, se desempeñaba en el flanco diestro.

El argentino pudo haber optado por ubicar a Mascarell acompañando a Gumbau en la medular, pero quiso apostar por la salida de balón del centrocampista reconvertido. El problema llegó a la hora de elegir el sustituto del canario en la medular. Carmona se ubicó en la sala de máquinas evidenciando que sus funciones no son las propias para desempeñarse en una zona tan calientes y más con la calidad del rival.

Carmona, como pivote

El andaluz estuvo incómodo durante el juego y, en lugar de actuar como central, que es una posición que se adapta más a sus cualidades, Beccacece apostó por reinventar su posición. Gumbau no encontró su sitio sobre el césped, en parte por el experimento del entrenador argentino que decidió desvestir el centro del campo para arropar el eje defensivo, a pesar de tener jugadores específicos en el banquillo (Diego González o Gonzalo Verdú, con Magallán saliendo de su lesión), sin olvidar que Raúl Guti podría haber actuado en la medular como pivote defensivo.

La parcela ofensiva franjiverde fue más lógica y previsible con Fidel y 'Tete' Morente en las bandas, en fase defensiva para intentar tapar por dentro la calidad del FC Barcelona, más Pere Milla en punta de ataque, presionando la salida de balón. El problema llega cuando la teoría de convierte en práctica y el poderío azulgrana se impone a la intención franjiverde. Tampoco los ilicitanos encontraron el enganche Fidel-Pere Milla propuesto y el juego ofensivo ilicitano se vio limitado y sin recursos con la ausencia de Lucas Boyé.

Dos semanas trabajando 

Beccacece ha estrenado el cargo con dos semanas de trabajo a la espalda y una propuesta de fútbol que deberá pulir, sobre todo ante rivales de un perfil menor al del FC Barcelona. Toda idea surge de la nada y debe ir construyéndose con el paso del trabajo y del tiempo, pero no parece que el planteamiento visto ayer pueda ser el más adecuado, no por dibujo, sino por sacrificar tus puntos fuertes (Mascarell como central) apostando por novedades (Carmona como mediocentro) cuando hay jugadores que pueden actuar de manera específica tanto en el eje de la zaga como en la medular.