Fútbol sala | JOVENTUT ELX
Esther Menárguez: "Hemos echado de menos una llamada del Ayuntamiento"
La presidenta del Joventut d'Elx lamenta la falta de atención recibida desde el área de Deportes, "al menos, un poco de aliento para seguir ilusionados ante la incertidumbre" aunque no duda de que se estén trazando estrategias para recuperar la normalidad
El Joventut d'Elx cuenta los días para regresar a la competición, con la ilusión de seguir trazando la línea que dibujaba en la Segunda División del fútbol sala femenino, que ha quedado congelada por la crisis sanitaria del covid-19. Esther Menárguez tiene claro que el club saldrá fortalecido por el carácter de supervivencia y capacidad de regeneración que les define pero no duda a la hora de señalar la necesidad de ayudas económicas y planes de acción que se deberán adoptar para paliar el impacto económico que sufrirán las entidades no profesionales de cara a la próxima temporada. La presidente del Joventut d'Elx, ha destacado en COPE Elche (100.8 FM) que el compromiso de las instituciones y patrocinadores será clave para superar la situación actual y ganarle el partido al coronavirus.
¿Cómo ha afectado la crisis sanitaria del covid-19 al Joventut d'Elx?
Es una crisis novedosa y, como tal, hace que nos hayamos teniendo que reconvertir como club. Trabajamos de la misma manera y mantenemos los lazos con nuestros equipos para que se sientan arropados por Junta Directiva y entrenadores. A pesar de las circunstancias, intentamos que sientan que estamos con ellos desde casa y noten el escudo que llevan en el pecho, hasta en el peor momento.
¿Está siendo una situación difícil de gestionar?
Sobre todo por la incertidumbre de qué pasará esta temporada, e incluso pensando en lo que será la próxima. La siguiente, a nivel económico, va a ser mucho peor para los clubes que no tenemos competiciones profesionales pero estamos en un nivel nacional alto. No somos profesionales y no tenemos tantas ayudas o recursos, y pasan los días y piensas que hay que empezar de cero. Hay que comprender a todos y remar en la misma dirección para resurgir de una situación inesperada pero que con trabajo, ánimo e ideas lo conseguiremos.
¿Han calculado cuál será el impacto en la economía del club?
Depende mucho de los compromisos de las instituciones. Los patrocinadores han cumplido en tiempo y forma, e incluso te llaman por teléfono para preocuparse por la situación. Las instituciones van a tener mucho que decir. La liga, de momento se ha completado hasta marzo, y hay que ver si se reanuda. Era un año muy bonito para nosotros y nos gustaría terminarla, pero bajo unas condiciones de salud necesarias para hacerlo.
¿Han notado la cercanía de esas instituciones?
La Federación española nos ha llamado, también la valenciana y la delegación de Elche. Lo hacen para ver cómo estamos y saber cómo va la situación. Hemos echado de menos una llamada del área de Deportes del Ayuntamiento de Elche, preocupándose por la situación. Al menos un poco de aliento para seguir ilusionados ante la incertidumbre, que cada día es un día menos que queda para salir de esto y hacer lo que más nos gusta. No dudo que se estén preocupando por el deporte, y lo que se hará cuando acabe el confinamiento, pero se agradecería una llamada, haciendo propuestas e ideas para cuando todo acabe.
¿Qué propuestas o ideas se le ocurren a usted?
Depende mucho de sí los torneos de reanudan o no, y la manera en la que se puede volver a los entrenamientos. Hay que definir cuáles deberían ser las pautas a seguir. Somos gente del deporte, y estamos en contacto con las federaciones, para saber cuándo podemos volver con unas pautas de prevención, instalaciones que se puedan usar... cómo volver a la vida normal para trazar un plan que, quizás se está haciendo pero no conocemos y no tenemos noticias. Pasan los días y todo es incertidumbre. Si supiéramos algo, al menos estaríamos más tranquilos. Nosotros no podemos planificar el campus de verano del que recogemos un dinero importante que ahora hay que sacar del presupuesto de la temporada. Somos un club humilde que lleva ocho años trabajando sin tener las cosas fáciles y eso nos ayudará a reflotar.
¿Tienen la posibilidad de acogerse a esa línea de financiación de 4.000.000 euros de la que habló Luis Rubiales para el fútbol sala masculino y femenino?
No tenemos esa opción. Es un crédito que se da a los clubes con unos parámetros que, para Segunda División femenina está dotado en 4.000 euros para cada uno, 2.000 euros en marzo y 2.000 euros en abril, pero tienes que justificar la profesionalidad de las jugadoras y eso, en esta categoría, no sucede. Esa línea de crédito es al 0% pero se debe devolver en dos años. Si se puede tirar para adelante sin ese dinero, mejor. Es endeudarse porque tienes que devolverlo, más los gastos de la temporada... tampoco 4.000 euros es un dinero importante. El Clínica Blasco Joventut d'Elx tiene unos gastos anuales de 60.000 euros y a nivel de club genérico el presupuesto es de 120.000 euros. No son cantidades que ayudan a paliar está situación. Es una ayuda que la RFEF propone pero los equipos no profesionales dudo que puedan acogerse.
Hablamos de dinero pero también de deporte y, siempre teniendo en cuenta las directrices de Sanidad. ¿Volverán a competir para terminar la temporada en la pista?
Yo hace una semana era optimista y veía la temporada acabada el en la pista pero si nos vamos a mediados de mayo, y empezamos poco a poco a salir, que veremos cuando tú dura ese poco a poco, y no creo que sea de golpe sino de una forma paulatina y con recortes de hora... nos vamos a ir a junio y lo veo complicado. Si hablamos de competiciones que mueven gran cantidad de dinero en el fútbol, o incluso en la Primera División de la LNFS, no digo que esas no acaben, pero Segunda División femenina es difícil. Deseo que se vuelva porque mantenemos la ilusión y esperamos que, con ciertas medidas y acabando más tarde, se reanude la temporada y podamos pelear por el ascenso. Tampoco se nos ha dicho nada como en otros deportes u otros países. Estamos a la espera pero cuanto más tiempo pase más incertidumbre tenemos para volver a empezar.