La industria del libro en España se siente óptima en el boom de la autoedición

Puede parecer paradójico que un país en el que se lee poco sea a su vez una potencia editorial en el mundo, pero es así. A pesar de que la salud del sector editorial está estancada en las últimas décadas sigue ofreciendo más de 45.000 puestos de trabajo y cuenta con altos volúmenes de ventas, pero el pastel se lo reparten las grandes editoriales, porque escribir pensando en que se va a vender el libro sigue siendo una ilusión.

Para imbricar y acabar dibujando un cuadro más complejo sobre el panorama de la industria editorial española, hay que señalar que estamos viviendo un verdadero boom de la autoedición mientras que el libro electrónico se ha estancado, por un lado se venden obras a precios bajos en muchas plataformas, obras que no llegan a 1 euro, pero la mayoría son de autores independientes que buscan lectores para las suyas y el lector digital no parece muy convencido de la calidad de las obras que se le ofertan, hasta el punto que se ha decidido por el libro de papel por encima del ebook, donde suele leer clásicos de la literatura universal bien traducidos.

Plataformas de autopublicación para autores democratizan el sector de la literatura

El 60% de los españoles compraron un libro en el último año en un país en el que se publican 86.000 de los cuales 60.000 son en papel y el 26% restante digitales. Cómo ocurre en otros muchos sectores se está viviendo una democratización de la literatura en el sentido que todo el mundo puede sentirse escritor autopublicando su obra.

El gran titán Amazon incluso cuenta con una plataforma de autopublicación para autores, Kindle, Direct Publisher, a la que muchos acuden a publicar su obra esperando que se convierta en todo un best seller, algo que ha ocurrido en Estados Unidos pero no en España.

Deben de existir fuertes razones estructurales que hacen que en España se editan más libros que en otros países como Alemania o Francia -donde se lee más- y una de ellas es la que hace que el editor vaya sacando libros para conseguir más ganancias de forma continuada por pocas que sean, lo que hace que el sector se sature. Sin embargo, las grandes superficies las tienen controladas las grandes distribuidoras y el lector medio puede ver cómo las novedades literarias más expuestas no difieren mucho de un lugar a otro. Sólo el lector curioso accede a títulos que no están tan promocionados, como ocurre en otros sectores, como el musical, cada vez más especializado.

Crece la venta por Internet mientras que las tiradas de libros se realizan sobre demanda

En el título del artículo hemos señalado que el sector de la industria del libro español se encuentra en un nivel óptimo y lo es en cuanto a volumen de novedades editoriales, otra cosa es indagar en un sector cargado de incongruencias en el que crece la venta por Internet mientras que las tiradas de libros se realizan sobre demanda.

Lo que está claro es que con tantos títulos publicados al año es absolutamente imposible conocer todas las novedades editoriales, pues no hay medio que las pueda aglutinar. La tendencia es la especialización editorial pero aún así el volumen del sector en España, que mueve 2.900 millones de euros al año es el más bajo de Europa junto a Italia que se sitúa dos puntos por debajo.

Alemania, en cambio, es el país donde más se lee de la Unión Europea, y cuenta con un volumen de 9.300 millones de euros. Hay mucho trabajo que realizar para conseguir sanar este sector tan contradictorio que incluso acusan los ecologistas al indicar el gran consumo de papel para la edición de libros -hay que tener en cuenta que editar en papel reciclado es más caro que hacerlo con papel al uso-.

Fuente: Vive Libro