Opinión | ELCHE CF
En manos de los futbolistas
El Consejo de Administración del Elche CF no ha querido volver a tropezar con la misma piedra, Vicente Mir no será una segunda parte de Alberto Toril. El valenciano ha tomado la puerta de salida del Martínez Valero porque el órgano rector franjiverde ha aprendido de los errores del pasado. “No tengas ningún tipo de duda” respondía Jorge Cordero hoy cuando se le preguntaba cuánto había influido en la decisión sobre el valenciano la experiencia de la pasada temporada con el andaluz.
Diego García ha decidido coger el toro por los cuernos para que el pasado no le influya en el presente y el futuro. Una decisión que choca de frente con la tomada la pasada temporada. La paciencia contra la impaciencia con un denominador común, las malas sensaciones, que no los malos resultados (o casi). En esta ocasión, al presidente franjiverde no le ha temblado el pulso para cortar una cabeza cuando el año pasado envió al equipo a Segunda División B por su pasotismo y falta de conocimientos futbolísticos.
Aún así, resulta curioso que dos hombres de fútbol como Mir y Cordero hayan unificado su discurso en torno a la actitud del futbolista del Elche CF. El valenciano no entendía ayer por qué su equipo deambuló sobre el verde y el cartagenero hoy ha preguntado en el vestuario. “¿Qué está pasando?”. La callada por respuesta. Monólogo del director deportivo ante los protagonistas de la película. Silencios incómodos que no deberían aparecer para, al menos justificar, la bochornosa imagen del equipo ayer ante un equipo de la zona baja.
Presidente, director deportivo y entrenador son, y deben ser, los responsables de la situación de un equipo pero no olvidemos a los artistas. Los que cobran por entrenar para ganarse el puesto y jugar. Los que están llamado a ser el motor de la ilusión, los jugadores. “Estamos en manos de los futbolistas” insistía hoy Cordero. Ellos, con su actitud son los que han propiciado la destitución de Vicente Mir (no lo digo yo, lo dice Cordero). Un entrenador que no ha sabido administrar la ilusión con la que llegó al Elche CF para transformarla en resultados y objetivos.
No cabe otra que mirar hace adelante y, sea cual sea el entrenador que asuma las riendas del equipo franjiverde, apretar el culo y sacar a relucir la calidad que el grupo atesora. Que con el escudo y la afición no se gana, lo sabemos porque nos lo explicó Mir; que sean ahora los jugadores los que ese mensaje, que tanto se ha enviado al entorno, no se convierte en la excusa perfecta para creerse que jugar en el Elche CF está al alcance de cualquiera.