Opinión | JORGE LLOPIS
Reacción de equipo fuerte
El Elche volvió a demostrar en El Sadar que su adaptación a la categoría de plata ha sido rápida y efectiva. El equipo de Pacheta se sobrepuso a varias situaciones adversas ante uno de los aspirantes el ascenso y dejó muy buenas sensaciones que invitan a ser optimistas.
El equipo supo rehacerse del vendaval inicial de los navarros. Lo sostuvo José Juan con dos grandes intervenciones, pero hubo otros factores que le permitieron salir airoso y con fuerza de esa difícil situación. La capacidad de lucha y de sufrimiento de este equipo empieza a ser una virtud de la mano de Pacheta. En El Sadar los apuros llegaron en momentos muy concretos y la sensación siempre fue de control y equilibrio. Porque aunque al equipo le falten dosis de calidad, éste no se viene abajo ante situaciones adversas y empieza a forjar una capacidad de supervivencia que podría ser su mejor arma de cara a lograr el objetivo de la permanencia.
Pacheta también mostró que tiene plan b. La lesión de Javi Flores fue cubierta por Provencio y no paso nada. Es cierto, eso si, que la del mediocentro es la posición con más efectivos de la plantilla. A día de hoy la baja de Sory o de alguno de los extremos, Josan o Iván Sánchez sería más difícil de suplir. Es evidente que la plantilla tiene sus limitaciones. Afortunadamente, el técnico burgalés y sus jugadores están obteniendo el máximo rendimiento de sus posibilidades. Incluso en Pamplona el Elche tuvo sus opciones de ganar. Hay que aplaudir está actitud ganadora. Jugar con un hombre más no siempre es sinónimo de superioridad.
Otro ejemplo de superación, y sin duda el más importante, se vio tras el gol de los rojillos. Encajar un gol cuando juegas con un hombre más es difícil de asumir. Al Elche no le trastocaron las planes. Entró Nino -benditos 38 años- y el equipo actuó con sensatez en busca del empate. Nada de locuras ni nerviosismo.
El premio del empate, más que merecido. El Elche se sobrepuso a las dificultades y evidenció sus buenas sensaciones. Sobre el césped hubo jugadores que hace poco estaban en Primera frente a otros que en junio peleaban en Segunda B. No se notó absolutamente nada. Los franjiverdes dejaron claro que no les ha afectado el salto de categoría y que tienen muchos argumentos para cumplir el objetivo.