Toc, toc… ¿Quién es? Soy el Elche
“El Elche ha llegado”. Categórico e ilusionado. ‘Pacheta’ no tenía reparo en presumir hace una semana tras empatar un partido que los franjiverde debían haber ganado. Siete días más tarde, el burgalés mantiene el brillo en los ojos que el optimismo regala cuando confías en las posibilidades que tienes. Queda mucho camino por andar, tanto como tropiezos habrá, pero este Elche CF ha cambiado respecto al debut liguero. Cuestión de tiempo, cuestión de trabajo. Sea cual sea el motivo, el equipo dio continuidad en Oviedo a las buenas sensaciones que empezó a dibujar una jornada antes sobre el tapete del Martínez Valero. Cierto es que los ilicitanos ya habían empezado a señalizar el camino hacia la recuperación mucho antes. En Zaragoza se vio un equipo fiable en defensa, aunque apagado en ataque.
Tampoco se debe sacar pecho, que en esto del fútbol todos sabemos que el telón se levanta cada siete días y de nada sirve lo que hiciste una semana antes para lo que hagas una semana después; pero si la receta a aplicar por el equipo va a ser la misma que la del Nuevo Carlos Tartiere, el menú promete. De primero solvencia y seguridad defensiva, de segundo eficacia y acierto goleador. Todo salpimentado con mucha solidaridad para que haya rock and roll en el plato, pero, sobre todo, ideas claras de postre. Ni antes se era tan malo ni ahora se es tan bueno. Sería tan radical ver desde el catastrofismo el inicio de competición, como iluso pedirle al equipo que, por haber mejorado sus prestaciones, pelee por algo más que la simple permanencia, mirando los últimos partidos en clave franjiverde.
Término medio y muchas ganas de trabajar y mejorar. Si el Elche CF ha llegado debe ser para quedarse. Nada de tocar a la puerta y salir escopeteado. No nos vayamos a quedar con el molde, pensara ‘Pacheta’, que sabe lo que tiene entre manos. El burgalés pedía paciencia para, como la temporada pasada, poder construir su proyecto con cimientos sólidos y seguros. Si alguien sabe qué mimbres tiene, ese es el entrenador. Por mucho que ‘Pacheta’ pregone a los cuatro vientos su satisfacción con el grupo configurado, como a cualquiera, cuanto más azúcar más dulce y si se trata de fútbol, pónganle dos cucharadas de más. De momento, el equipo franjiverde ha tocado a la puerta para quedarse a cenar. Las próximas jornadas dirán cómo resulta la digestión.